¿QUÉ ES LA FELICIDAD?
![]() |
Hoy
vengo a hablarle de la Felicidad.
Y, más precisamente, de su felicidad a
diario. Para vivir la cada día con más intensidad, le propongo 4 Mandamientos
que le ayudarán a vivir una vida feliz y
exitosa.
¿Qué es lo que quiero decir con Felicidad “a
diario”?
Quiero decir que
los humanos tenemos tendencia a no satisfacernos con nuestra vida presente.
Aureolamos el pasado con alegrías que no son siempre justificadas (olvidando
porque nos conviene que también hemos vivido malos momentos) y nos imaginamos
un futuro “forzosamente” feliz e incluso –por qué
conformarse con poco- coronado con todos los éxitos.
¡Pero
mientras lamentamos el pasado y soñamos con un futuro hipotético, el
tiempo, nuestro tiempo, pasa en pura pérdida y al despertarnos (porque la vida
se encarga de despertarnos, ¿no es así?), somos incluso más infelices!
¡No digo que no hay que honrar su pasado o hacer
proyectos para su futuro, digo que la Felicidad, la verdadera, la Felicidad duradera,
empieza aquí y ahora!
Es esta Felicidad que
hoy le propongo aprender a “cultivar”.
Pero,
me preguntará cómo cultivar la Felicidad. ¿Será tan simple como parece?
Sí, se lo afirmo y se lo voy a demostrar dentro de poco.
Mandamientos para cultivar la Felicidad
Estos
cuatro fundamentales que llamaré mis “4 Mandamientos” son para mí los Cuatro
Pilares de una vida exitosa:
1°
Mandamiento: Cultivar los pequeños placeres de la vida
Placer
de comer cuando tiene hambre, beber cuando tiene sed, dormir cuando tiene
sueño.
Placer de encontrar a un amigo, de besar a un allegado, de ver el sol a través de las nubes, la lluvia que refresca un día de calor bochornoso…
2°
Mandamiento: Aprender o volver a aprender a amarse
Deje
de echarse la culpa, de culpabilizar, de desvalorizarse; dese cuenta de que es
el ser más maravilloso que exista siempre y que existirá siempre.
Entienda bien que no hay peor enemigo que su propia persona ante el espejo de la Felicidad.
3°
Mandamiento: Vivir cada momento de felicidad con intensidad
Agarre el instante que procura la felicidad,
como si fuera una eternidad, para apoderarse de ella, porque todo pasa. Pero
dígase también que si la felicidad pasa, las penas también, tarde o temprano,
se cansarán de frecuentarlo y se irán hacia otros horizontes.
4°
Mandamiento: Nada ocurre por casualidad
Debe entender que nada de lo que se le da (penas o alegrías)
existe porque lo ha atraído a usted para hacer su aprendizaje de la vida
consagrado. Y debe saber que todo sólo es efímero, no permanente, pasajero para
acercarle a la eternidad de lo divino.
Utilizar
estos Cuatro Mandamientos como principios de vida, es hacer de ellos los
Cuatro Pilares de un Templo en el que puede realizar ahora los pequeños
“rituales de vida” que siguen, simples pero eficaces y que le van a permitir “vivir
la Felicidad” a Diario.
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario